¿Qué significa esto? Que todos los vecinos que pagan los gastos de las calderas centrales a través de los gastos de la comunidad, que era una cantidad fija que no variaba a lo largo del año y que dependía de los metros cuadrados de su vivienda, a partir del 1 de enero de 2017, pagan en función de su consumo, realizando así un uso más racional de la energía.
Instalaciones de calefacción individual
Para poder contabilizar los costes de calefacción de manera individual deberemos tener en cuenta la forma en que se distribuye la red de tuberías de calefacción dentro del edificio ya que puede seguir dos patrones, en columna o en anillo.En aquellas instalaciones de calefacción que son en anillo, es decir, un único punto de entrada y de salida para cada vivienda, será viable instalar estos contadores individuales en la entrada de cada vivienda.
Sin embargo, si la instalación es en columna, es decir, el radiador de una estancia del primer piso comparte entrada con la misma del piso superior y así sucesivamente, el uso de contadores de consumo individuales no es técnicamente viable. En este caso, se tendrán que utilizar repartidores de costes de calefacción para medir el consumo de calor de cada radiador.
Ventajas de la calefacción individual
- Cada vivienda paga únicamente por el consumo que realiza, de forma que en viviendas deshabitadas o con pocos integrantes se puede ahorrar bastante en la factura.
- Cada vecino puede poner la calefacción durante el tiempo que considere oportuno.
- Se puede encender libremente a las horas que sean necesarias.
- A la hora de encenderla, se puede elegir en qué estancias conectar la calefacción y en cuáles no, ahorrando así en el gasto de energía y de dinero.
- Permite regular a qué temperatura exacta queremos que funcione la calefacción.
- Evita problemas comunitarios por el gasto excesivo de unos vecinos frente a otros.